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Horizonte de Sucesos
(Renacimiento, 2021)
Juan Bonilla

Tres poemas de horizontes de sucesos de juan bonilla
Fotografía de Bea Aragón
EL JUEGO

Viniendo cada cual de su bautismo
rumbo a su funeral,
vamos siguiendo el espejismo
del árbol del bien y del mal.

En sus ramas un pájaro cantante
permanece muy quieto
tarareando quizá su gran secreto:
vivir es insignificante.

Ser es tan raro como ya haber sido.
No hay oficio más puro
que destruir la cárcel de un futuro
donde se duerme todo lo vivido.

Piezas de un juego tan banal
que consiste en ir sorteando abismos,
viniendo cada cual de su bautismo
rumbo a su funeral,

siempre con una pistola en la sien
vamos siguiendo el espejismo
del árbol del mal
y el bien

por una senda enamorada
–a veces cubierta de lodo–
que lleva de la nada hasta la nada
pasando por el todo.

***

PARADISE

Llevas el paraíso dentro.
Lo sé porque yo he estado.
Es un lugar tan lento
que nada se tergiversa en pasado.

Pradera inmensa donde troto,
confiado y seguro,
hasta el simple futuro
que ya lo sabe todo de nosotros.

Furioso abismo
que sin embargo acaba en cumbre:
salirse de uno mismo
congelarse en la lumbre

de ser un sí rotundo,
relámpago sumiso,
canción que purifica el mundo.
Dentro de ti llevas el paraíso. 

***

QUÍMICA
ya bajan por mis sienes lentos potros
expandiendo su milagrosa calma
la certidumbre nueva de que el alma
es algo que está fuera de nosotros

en los racimos que el sol dora lento
en el canto del mirlo puntual
en el martillo que ha rendido la fatal
conciencia de no ser más que alimento

para la muerte que es siempre futuro
ya bajan por mis sienes potros lentos
pisando los cristales violentos
que cercan el abismo sucioscuro

de ser tan solo un yo una biografía
alternando los gozos y los ascos
ya van los lentos potros con sus cascos
de hielo transformando en melodía

esa cerca de cristales en picos
liberando el abismo de mi adentro
fuera de mí queda mi propio centro
mis años convertidos en añicos

queda aplastada así esta maldición
de escuchar cómo el tiempo cava y cava
tarareando su siniestra canción:
pronto se va a acabar lo que se os daba.