Fotografía: Jesús Massó
Resultados del “Primer pulso social sobre energía en la ciudad de Cádiz”
“¿Qué sabe de energía? ¿Conoce su factura de la luz? Espere, no vaya a buscarla, queremos que nos responda sin mirarla”.
Así, o de forma parecida, comenzábamos las encuestas que hicimos desde la Mesa de Transición Energética de Cádiz durante los meses de mayo, junio y septiembre en nuestra ciudad. Voluntarios y voluntarias de la Mesa nos tiramos a la calle para preguntarles a 450 personas qué sabían de energía, en concreto 23 preguntas que versaban desde conocimientos de la factura de la luz hasta qué sabían de energías renovables, qué modelo energético pensaban que había tanto en nuestro país cómo en nuestra ciudad y cuál era el que deseaban.
¿Y por qué lo hicimos? Porque la energía siempre ha sido un tema que dejamos a expertos, a señores enchaquetados que deciden en consejos de administración su porvenir. Y pensamos que debe ser así porque creemos que es un tema que nos queda grande a la ciudadanía, o que no nos afecta. Pero la realidad es otra, la realidad es que desde que nos levantamos, hasta que nos acostamos, incluso, cuando dormimos, estamos consumiendo energía. Una energía que necesitamos para vivir, y queríamos saber hasta qué punto es la gente consciente de su importancia.
Lo cierto es que estamos pagando una factura, por un bien necesario, sin saber realmente qué estamos pagando y por qué, estando muy relacionados el derroche con el desconocimiento sobre la misma. Y, aunque queremos cambiar de modelo energético, porque en el fondo sabemos que el actual produce contaminación, cambio climático, guerras, etc., no sabemos cómo instrumentalizarlo. Para llegar a cambiar el modelo hace falta una transición, y esa transición debe venir impulsada por la ciudadanía y para ello es necesaria la cultura energética.
Pero, ¿hasta qué nivel llega ese desconocimiento? Pues gracias a este “Primer pulso social sobre energía en Cádiz” podemos ponerle cifras en la ciudad. Estas son algunas de ellas:
- Un 70% de la población encuestada dice que no entiende bien su factura eléctrica.
- Cerca de la mitad desconoce qué potencia tiene contratada.
- Casi el 60% desconoce la tarifa que tiene contratada y menos de un 6% tiene la tarifa con discriminación horaria.
- Más de la mitad de la población desconoce qué es la tarifa con discriminación horaria.
En líneas generales podemos afirmar que la inmensa mayoría de la población desconoce su factura eléctrica, y por tanto, desconoce si lo que tiene contratado se ajusta o no a sus necesidades. Difícilmente podremos ahorrar en nuestra factura si ni siquiera sabemos qué estamos pagando. El potencial de ahorro mediante la optimización de la factura es enorme, la inmensa mayoría de las familias lograrían un sustancial ahorro ajustando la potencia contratada y contratando la tarifa con discriminación horaria.
Sorprende que personas encuestadas que afirmaban tener una tarifa 2.0A (sin discriminación horaria) declaraban poner los consumos a horas intempestivas para ahorrar, lo cual no sirve de nada al no tener contratada la tarifa DHA (discriminación horaria), lo que da una idea del nivel de desconcierto al que hemos llegado.
La segunda parte de la encuesta trataba sobre los tipos de energías y sus impactos. Llama la atención descubrir que nueve de cada diez personas encuestadas distinguen con dificultad las renovables de las que no lo son.
Sin embargo, a pesar de ese desconocimiento, seis de cada diez personas piensan que las energías renovables son más baratas que las fósiles. En general la gente tiene una imagen positiva de las energías renovables. Aunque no se tiene un conocimiento real de sus ventajas sobre las energía sucias, la creencia popular es que son mejores, más baratas y son el futuro.
A pesar de que no somos conscientes de cómo nos afecta de forma directa la producción de energía sucia en nuestro entorno más cercano, apostamos por las energías limpias y renovables. Hasta qué punto ignoramos la manera tan directa en que las energías sucias y extractivas nos afectan se hace evidente al ver que un 60% de las personas encuestadas desconoce qué es el fracking y sus consecuencias. Esto es especialmente llamativo en esta ciudad, puesto que en la provincia de Cádiz se han concedido permisos para explorar mediante esta técnica en busca de gas en alrededor de 82.000 hectáreas (más del 10% de la superficie total de la provincia).
Siguiendo con esta buena percepción de las energías renovables, existe una predisposición muy positiva por parte de la población gaditana a la instalación de renovables, tanto a nivel municipal como a nivel nacional.
- A un 92,6% de la población le gustaría que la ciudad de Cádiz se abasteciera de forma mayoritaria de energías renovables.
- Un 94,4% de la población querría que España fuera autosuficiente energéticamente con renovables en 2050.
- Además, del 19,3% de la población que pensaba que las energías renovables eran más caras, aun así, se mostraban positivos ante un modelo renovable tanto a nivel municipal como nacional.
La gente quiere renovables, y quiere que las administraciones actúen en favor de su implantación e impulso. Ante la pregunta ¿te parece que el Ayuntamiento esté impulsando un modelo renovable y eficiente? casi la mitad contestó que no sabía y un 40% dijo que no. Tan solo el 13 % afirmó que sí lo estaba impulsando. Es necesario un compromiso institucional para alcanzar el horizonte de una ciudad 100% renovable en el 2050 y el Ayuntamiento juega un papel muy importante para lograrlo. Una finalidad de este estudio es servir de acicate para las instituciones al hacer evidente que es una demanda ciudadana.
También preguntamos a la gente qué medidas de eficiencia energética le gustaría que implementara el Ayuntamiento de Cádiz y sus preferencias por este orden fueron: Cambiar el alumbrado público a Led, hacer campañas de formación y sensibilización en ahorro de energía, ajustar los horarios del alumbrado público e instalar renovables en edificios públicos.
Este primer pulso social sobre la energía en Cádiz se cierra con una batería de sugerencias dirigidas tanto a la ciudadanía como al Ayuntamiento y partidos políticos. Es necesario formarse e informarse, cooperar entre todos los agentes implicados, tanto públicos como privados, y alcanzar los compromisos indispensables para lograr un nuevo modelo energético basado en la energía como bien común.
Aquí te puedes descargar el estudio completo y las recomendaciones
Tener este estudio hoy sobre la mesa no ha sido nada fácil. Ha requerido un enorme esfuerzo personal lograr entrevistar a 450 personas de todas las edades y barrios, en con una muestra que guardara una proporción representativa de la ciudad. Han sido muchísimas horas de trabajo y dedicación entregadas de manera altruista por parte de las personas que formamos la Mesa de Transición Energética de Cádiz.
Pero, este esfuerzo no nace para morir en este primer pulso social, al contrario, nace para ser germen de futuros pulsos sociales llevados a cabo en otros lugares, ya sea por plataformas, ayuntamientos u otras organizaciones. En la ciudad de Cádiz, nos gustaría que fuera el propio Ayuntamiento el que cogiera el testigo, repitiendo este pulso social sobre energía cada 2 años, convirtiendo así el conocimiento en herramienta para el cambio de modelo energético, a medio y largo plazo.