Ilustración: Pedripol
Recientes acontecimientos locales como el fallecimiento de una persona sin hogar, una más, las actividades y movilizaciones de esta semana contra la violencia de género y los insultos racistas a un futbolista juvenil nos hacen cuestionarnos, en este número, qué relación tiene Cádiz con el otro. Problemáticas de alteridad y de identidad inflexible que tienen su base en el miedo a lo diferente. Y no hablamos de minorías –las mujeres son más de la mitad de este mundo- sino de relaciones de carácter jerárquico que sitúan los discursos hegemónicos en una visión heteropatriarcal y eurocentrista que nada tiene que ver con la diversidad de la que está compuesta el mundo que habitamos.
“Resulta curioso que diversidad y diversión procedan de la misma palabra latina, ‘diuertere’. Lo diverso como algo ameno; lo diferente como algo festivo, digno de celebración, que nos abre nuevos caminos y que nos ayuda a crecer, a mejorar. Quizás proceda aquí hacer referencia a la distinción que hacían los ilustrados del XVIII entre ‘naturalia’ (lo que procede de la naturaleza, con sus excepciones) y ‘artificilia’ (lo creado por los hombres, las normas sociales, por ejemplo). ¿Hay algo menos humano y menos divertido que ser artificial?”
(Paco Cano, Rara tú que eres normal, La Voz de Cádiz, 27-03-2011)
Dedicamos el doble dossier de esta quincena a reflexiones sobre misoginia, homofobia, racismo o desatención a personas en exclusion social. Este doble dossier viene ilustrado por Pedripol. En la segunda parte de esta nueva entrega presentamos la segunda entrega de la serie Cádiz Crofundo, fotografías de Jesús Massó. También se nos incorporan Iván Cano y Javier Vela como nuevos colaboradores. Lujazo. Cada vez somos más, más diversos y más divertidos. Una sociedad es un ecosistema y no hay evolución para un ecosistema si no hay diversidad. Hagamos que este Cádiz avance mediante el respeto y la inclusión. A divertirse con la diversidad de este número 17.
