Las nubes, en su deambular por el celeste, dibujan imágenes y cuentan historias. En algún lugar del Universo, un colosal bebé se entretiene con las sombras chinescas de la Tierra.
Cuando se disuelven las nubes y en la pantalla terrestre se pierden las figuras, el colosito llora y patalea hasta que su agitación provoca una nueva borrasca; entonces, una nueva compañía teatral de cúmulonimbos se apresura a aplacar la ira del párvulo creador.
Texto: Juan Rincón
Rate this post

