«Recuerdo la manifestación `mounstrua´ aquella que pasó por los Callejones, donde yo vivía…»
Constantino Gutiérrez López (Cádiz, 1924 – San Fernando 2019).
Como bien es sabido, el 12 de abril de 1931, se celebraron elecciones municipales en toda España. Las prácticas caciquiles electorales implantadas en la Restauración, y simultaneadas durante la dictadura de Primo de Rivera, quizás no influyeron para evitar que los republicanos de Cádiz se alzaran con la victoria, aunque bien es verdad que terciaron para sumar gran cantidad de votos a la corrupta candidatura monárquica. De hecho Cádiz fue una de las nueve capitales de provincia, a nivel nacional, donde no ganó la candidatura republicana; y la única capital andaluza donde sucedió lo mismo. No obstante, aquella misma noche del 12 de abril se conocía, en las calles de Cádiz, la victoria republicana en el resto del país, por lo que se improvisó una manifestación hasta la casa del líder del Partido Republicano Autónomo, Emilio de Sola Ramos. Al día siguiente, y en los sucesivos, las protestas fueron a más: manifestaciones, denuncias de compra de votos,… No muy lejos quedaban aquellas manifestaciones del candidato monárquico Ramón de Carranza:
“Cuando os entreguen en la calle las hojas y los manifiestos de los republicanos y socialistas, rompédlos en el acto y retorced el pescuezo a las personas que los repartan”.
El presidente interino de la Audiencia, en nombre del Gobernador Civil, oyendo dichas reclamaciones, indicó la creación de una Junta Municipal de nueve miembros para gobernar en el Ayuntamiento mientras que no se celebraban nuevas elecciones. El 16 de abril quedó instaurado en Cádiz un nuevo cabildo municipal, bajo el nuevo régimen republicano que en aquellos días veía la luz en España. A dicho acto, que fue seguido de forma masiva en el Salón de Plenos, asistió, entre otras personalidades, el Gobernador Civil de la provincia Manuel Fernández Gordillo. Tras el nombramiento, sin la asistencia del anterior alcalde Ramón de Carranza, el Gobernador Civil dio unas palabras que fueron seguidas por las de Juan Antonio Santander Carrasco –el más veterano de los socialistas de Cádiz-, así como del nuevo alcalde, Emilio de Sola. Dejamos aquí un extracto sobre el advenimiento de la República en Cádiz en palabras del nuevo alcalde Emilio de Sola:
“…el pueblo de Cádiz congregado en su casi totalidad en la Plaza de Isabel II, hoy de la República, cogió en vilo lo mismo a Republicanos que a Socialistas entrando de esta manera triunfal en la Casa del Pueblo, por la puerta grande, que equivale a decir con todos los honores, viéndose obligado con todos ante los requerimientos de la muchedumbre, a dirigir su palabra al público, desde el balcón de la Casa Capitular”.
El acto de composición de la nueva corporación municipal, esta vez sí elegida democráticamente ante las urnas, fue de gran solemnidad. Ante un abarrotado Salón de Plenos, Emilio de Sola pidió a los concejales Santiago Rodríguez-Piñero, Santander, Mariano Cancelo y Pedro Icardi que salieran y dirigieran hasta el Salón a los concejales entrantes que esperaban en el despacho de la Alcaldía. De esta manera, bajo mazas y con gran algarabía del público asistente, entraba la nueva Corporación. Se dio lectura del acta de la Junta Electoral en la cual se daba a conocer los cuarenta concejales electos. Seguidamente tomó la presidencia Tomás Fabrellas, al ser el más votado y se llevó a cabo la elección de alcalde, siendo elegido Emilio de Sola por 33 votos a favor y dos en blanco. Tras unas palabras del alcalde, donde no podían faltar claras alusiones a la mala situación del paro obrero -así como algunas de las medidas que en breve se comenzarían a adoptar para paliarlo como eran el derribo de los Glacis o las obras de la Zona Franca-, fueron elegidos los Tenientes de Alcaldes. Pero dicha corporación sólo sería momentánea. Un mes después se convocaban nuevas elecciones municipales para aquellos municipios donde hubiera habido expedientes de protestas. El joven republicano Manuel de la Pinta había sido uno de los denunciantes. Así, Cádiz capital sería una de las veinticinco localidades afectadas en la provincia. Para dichas elecciones los republicanos y socialistas de Cádiz, decididos a barrer del mapa electoral todo símbolo del antiguo caciquismo, se presentan unidos bajo las siglas del PRA. Quedaba instaurada, de forma oficial y legal, la II República en la ciudad de Cádiz.